En la atención primaria de la Salud se combinan de forma segura, eficaz y socialmente el mantenimiento de la salud, la prevención y los cuidados, uniendo los trabajadores y el sistema de salud.
El objetivo principal en pocas palabras es «dar prioridad a las personas»: teniendo en cuenta de manera equilibrada la salud y el bienestar, así como los valores y las capacidades, de los trabajadores y de los servicios sanitarios.
Las características de la atención en salud, junto a la eficacia y la seguridad, elementos esenciales para conseguir el bienestar de los trabajadores son la atención centrada en la persona, la integralidad y la asistencia permanente, con un punto de acceso al sistema sanitario para que los trabajadores y quienes los atienden puedan entablar una relación duradera basada en la confianza.
La organización de la prestación de los servicios de atención sanitaria para el trabajador, requiere el cambio hacia una atención de carácter ambulatoria y generalista que se responsabilice de los trabajadores y coordine el apoyo brindado por los hospitales, los servicios especializados y las organizaciones de la sociedad civil.
La buena atención gira en torno a la persona, es mucho más importante saber qué clase de trabajador tiene una enfermedad, que la clase de enfermedad que tiene el mismo.
No reconocer la dimensión humana de la salud y la necesidad de adaptar las intervenciones de los servicios de salud a las características de los trabajadores y la situación individual de ellos, son fallos importantes de la atención en salud, que no sólo generan inequidad y resultados sociales insatisfactorios sino que también limitan el rendimiento de las inversiones en salud.
Adaptado: “La atención primaria de salud” Organización mundial de la salud